El pasado sábado, el Auditorio de Beniarbeig se llenó de música, emoción y recuerdos en un concierto homenaje a la voz eterna de Nino Bravo. De la mano del artista y compositor Sebastián Cuenca, el público revivió algunos de los éxitos más queridos del cantante valenciano en una velada cargada de sentimiento y complicidad.
La respuesta de la gente fue extraordinaria: 164 entradas vendidas y una recaudación de 1.178 euros, que se destinarán íntegramente a apoyar la labor de Amunt contra el Cáncer, una asociación que trabaja incansablemente en la lucha contra esta enfermedad.
La organización quieren expresar su más sincero agradecimiento a todas las personas que asistieron, a quienes colaboraron y a quienes, de una forma u otra, hicieron posible esta noche tan especial. “Cada entrada, cada gesto y cada aplauso suman en nuestra misión. Cuando la música y la solidaridad se unen, se crea algo que va mucho más allá de un concierto”, señalaron al cierre del acto.
La magia de la música de Nino Bravo iluminó el escenario y, al mismo tiempo, encendió la esperanza y la fuerza colectiva en la lucha contra el cáncer.
