Esta mañana, los residentes de la residenia Santa Lucía de Dénia han vivido una jornada muy especial gracias a una actividad de terapia asistida con caballos organizada por el propio centro en colaboración con Argudo y Pura Vida. En un entorno natural y sereno, al aire libre y bajo un sol primaveral, decenas de ancianos han podido interactuar con estos nobles animales, disfrutando de una experiencia emocionalmente enriquecedora y terapéutica.
La iniciativa forma parte del programa de envejecimiento activo del consistorio, cuyo objetivo es ofrecer a los mayores no solo cuidados médicos y atención diaria, sino también actividades que fomenten su bienestar emocional, cognitivo y físico. La terapia asistida con caballos es una práctica cada vez más valorada en el ámbito geriátrico, debido a los múltiples beneficios que aporta: estimula la memoria, mejora la autoestima, reduce el estrés y favorece el desarrollo de habilidades motoras y sociales.
A lo largo de la mañana, los ancianos, acompañados por terapeutas especializados, cuidadores y personal del centro, han podido acariciar e incluso alimentar a varios caballos especialmente entrenados para este tipo de sesiones.
Una de las residentes más entusiastas del centro, compartió entre risas: “Nunca imaginé que volvería a estar tan cerca de un caballo. Me ha recordado mi infancia en el campo. Ha sido como un viaje en el tiempo”.
La edil de Medioambiente de Dénia asegura que estas terapias “son especialmente eficaces para pacientes con demencia o Alzheimer, ya que el contacto con los animales genera respuestas emocionales muy positivas, incluso en etapas avanzadas de la enfermedad”. Ha añadido que “el simple acto de acariciar al caballo, sentir su calor y su respiración, puede activar recuerdos y emociones dormidas”.
Las cuidadoras de la residencia han comentado la importancia de integrar este tipo de iniciativas en la rutina del centro: “Queremos que nuestros residentes se sientan vivos, conectados con el entorno y con sus emociones. La equinoterapia nos brinda una oportunidad única de romper la rutina y ofrecerles momentos que realmente marcan la diferencia”.
Desde el equipo de Santa Lucía ya se están organizando nuevas fechas para repetir la experiencia en los próximos meses, dada la excelente acogida por parte de los mayores. Estas son las pequeñas cosas que tienen un gran impacto.
Con actividades como esta, la residencia Santa Lucía de Dénia demuestra que el cuidado de los mayores va mucho más allá de lo físico: es también una cuestión de alma, de memoria y de emoción.