Vivir en el Mediterráneo y en la Marina Alta permite disfrutar del mar en todas sus dimensiones y esplendor, surfeando, por supuesto, también. Su azul te reviste con su belleza, pero también con sus sensaciones, las que África Gómez persigue, una surfista de Dénia que vive el mar con toda su intensidad, buscando y esperando la ola perfecta que le haga experimentar ese momento de adrenalina y libertad. Su curiosidad por subirse a la tabla de surf la sintió desde pequeña, pero necesitó un empujón que lo ha convertido en su pasión.
Las aguas de Dénia, Xàbia, Moraira, Benissa, Calp, Almería o Portugal le permiten una buena dosis de diversión. Aunque, ¿dónde están esas que nunca podrá olvidar? No lo duda, en Las Maldivas. El calendario de África se basa en la oportunidad o no de que asome una ola, en atrapar un día frío que agité el mar para bailarlo, a veces incluso, con una sacudida que hace temblar su equilibrio y tambalear su corazón.
Una, dos, tres y miles de ocasiones... así se queda aguardando, a la conquista de esa ola sobre sus pies que le salpica hasta el alma.